lunes, 27 de junio de 2011

Fighter

No tenía miedo a las dificultades: lo que la asustaba era la obligación de tener que escoger un camino. Escoger un camino significaba abandonar otros.
Y si hay algo que tenía claro es que en la vida hay que tomar decisiones arriesgadas porque solo así sería capaz de sobrevivir a lo que pueda llegar a suceder en un futuro.
Toda una vida por delante, el deseo de cumplir todos sus sueños y ser feliz, sí, merecía ser feliz de una vez por todas.
Ahora se había dado cuenta de que le tocaba a ella pensar en sí misma.
Se había sentido mal,traicionada, rota en pedazos como cuando un cristal cae de golpe al suelo, y no hay forma de arreglarlo.Pero todo eso quedó en el pasado.
Sus ojos habían pasado de estar opacos y tristes a llenarse de luz y brillo.Su boca pintaba sonrisas y ahora se le escapaban sin querer.
Estaba preparada por lo que fuese a suceder,tenía la esperanza de poder conseguir todo lo que se proponga.
Y mírala ahora, una mujer de los pies a la cabeza que luchó por lo que quiso y lo consiguió, con esfuerzo,seguridad, y sobretodo,con valentía.
Encontró su camino.